La logística actual incluye a la tienda, no sólo al almacén

Hasta hace bien poco al empresario medio del calzado o del textil no le importaba para nada el embalaje con el que se enviaban los artículos al cliente final, si se usaba una bolsa o una caja, el color del sobre, o cualquier otro detalle insignificante como la documentación que debe acompañar a cada envío.

Tradicionalmente, la interacción con el cliente se dejaba en manos del repartidor de la empresa de transporte. ¿Resultado? Los productos llegan tarde, dañados, nadie le preguntaba al cliente la mejor hora para llevarle algo a su casa, etc. ¿Así se gana uno la satisfacción del cliente?

Es más, en los almacenes centrales a nadie le ha hecho falta gestionar la organización del propio almacén, las hojas de ruta, los sistemas de etiquetado orientados al cliente.

Hasta hace poco, absolutamente nada era importante en la logística… hasta hace poco.

Las empresas hoy deben ser puntuales y rápidas en sus entregas, eficaces en su gestión de almacén, buscando siempre minimizar los tiempos de preparación. Hoy incluso el embalaje es objeto de estudio por parte del cliente, de ahí la necesidad de usar sistemas sostenibles.

Cuando es el comprador el que tiene el control, la logística se convierte en un factor esencial, estratégico dentro de la empresa, que aporta valor y que crea diferencias con la competencia.

Desde la irrupción de Internet, el retail se ha dado cuenta de que una buena operación logística requiere innovación, de un estudio constante de las necesidades del cliente que aporte mejoras continuas que nos aseguren que nuestra empresa gana en eficiencia y competitividad.

Lo más importante para los clientes actuales, y de ahí buena parte de la enorme aceptación de la venta por Internet, es su tiempo. A nadie le sobra tiempo. Debemos poner el cliente en el centro de nuestras operaciones logísticas, haciendo los cambios necesarios para asegurarnos de que nuestro cliente es atendido en el tiempo y con la forma acordada.

La logística no puede fallarle a nuestro cliente, o el cliente nos fallará a nosotros.

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta